Episodio Piloto: Una hora menos en Canarias, una hora más en J

Escena 1: El piso de J, C y U

La cámara recorre un piso caótico. Una mesa llena de restos de pizza prosciutto (cortesía de J), una estantería llena de literatura rusa pachamamesca (gracias a U), y un rincón con un tablero lleno de diagramas maquiavélicos de C. De fondo, suena “Dancing Queen” de ABBA, porque J insiste en que es la mejor canción de la historia.

J (tirado en el sofá, comiendo galletas Dinosaurus):

— Tíos, ¿os habéis parado a pensar que las Dinos son como la evolución? Estás comiendo historia pura. ¡Yo soy Darwin, pero con chocolate!

C (mirando a J con desdén mientras dibuja un diagrama de flujos):

— J, lo único que evolucionas es el nivel de colesterol.

U (desde el escritorio, escribiendo en un cuaderno reciclado):

— No seáis comerciales, por favor. Estoy creando un ensayo sobre la influencia del periquito vietnamita en el movimiento indie.

J:

— ¿El periquito qué? A ver, U, lo tuyo ya es pasarse. Ni los náhuatls entienden tus movidas.

C (sarcástico):

— Claro que no lo entienden, J. Pero tú tampoco entendiste el menú del restaurante ayer. ¿Te acuerdas de lo de “bonitas piernas, a qué hora abren”? Qué vergüenza.

J:

— No te pases, C. Al menos no vomité en el coche de mi viejo.

Silencio incómodo.

Escena 2: El bar de siempre, “El Hannover”.

Los tres están sentados en la barra. J bebe vodka con cerveza porque es barato, U se pide una infusión ecológica de jengibre, y C pide un gintonic, porque según él, “es la bebida de los que saben calcular probabilidades”.

J:

— Tíos, tengo una idea. Hay que hacer algo para romper con la monotonía. ¡Montemos un negocio!

C (arqueando una ceja):

— ¿Negocio? J, tu idea de negocio es vender palmeritas de chocolate puerta a puerta.

U (irónico):

— ¿O qué tal un restaurante temático? Pero que solo sirva platos a base de quinoa. ¿Demasiado comercial para ti, J?

J:

— No sé, U, pero prefiero vender quinoa que pasarme 8 horas leyendo a Dostoyevski y pensando que soy especial.

C:

— A ver, dejad de dar vueltas. Si hacemos algo, será algo serio. Algo calculado. Montemos un club de póker. Yo manejo las probabilidades, U pone la imagen intelectual, y tú, J, eres el anzuelo perfecto: nadie te tomará en serio.

J:

— C, algún día me respetarás. El día que deje de pedir pizza prosciutto… o cuando pierdas en póker contra un principiante.

Escena 3: El club clandestino de póker.

Han montado un club en el piso. Las mesas están llenas de jugadores principiantes, atraídos por la promesa de “diversión sin compromiso”. U lleva un delantal pachamamesco mientras reparte té de jazmín, J anima a todos a apostar más, y C está concentrado, manejando las apuestas como si fuera el villano de una película de James Bond.

J (a un cliente):

— Venga, tío, apuesta. El que perdona murió en la cruz, y tú no estás aquí para rezar.

C (susurrando a U):

— Este negocio tiene potencial, pero J tiene que dejar de hablar como un cuñado.

U:

— Al menos está atrayendo gente. Eso sí, como esto se vuelva demasiado comercial, yo me largo. De repente, un tipo extraño entra en el club. Es Paco Luque, su antiguo profesor de Matemáticas y Física.

Paco Luque:

— Vaya, vaya. Así que aquí es donde terminan mis exalumnos. J vendiendo humo, C tramando estrategias, y U… bueno, haciendo lo que sea que hagas tú. ¿Cómo os va con los “datos crudos”?

U (nervioso):

— ¡Son datos brutos, Paco! ¡Brutos!

J (intentando cambiar de tema):

— Bueno, profe, ¿una partidita? Si pierde, paga la pizza prosciutto para todos.

Paco Luque (sonriendo):

— Acepto, pero si gano, quiero una exposición sobre por qué las gambas no se descabezan en un club de póker.

Escena final: El piso.

J está emocionado porque ganaron suficiente dinero para comprar más Dinosaurus. U está indignado porque ahora el club tiene una máquina de pinball, que él considera demasiado comercial. C, mientras tanto, planea cómo expandir el negocio.

C (a la cámara, rompiendo la cuarta pared):

— Esto no es el final. Esto es solo el principio. Corte a negro.

Tema de cierre: “Take a Chance on Me” de ABBA.